En los últimos tiempos la tecnología de iluminación LED lo ha conquistado todo y, de una forma u otra, ha revolucionado la manera en la que ponemos luz a nuestros espacios en casa. Pero muy especialmente, esta tecnología ha tenido un impacto directo en la parte de los videojuegos, donde muchos usuarios optan por dispositivos capaces de transformar sus áreas de juego en una verbena de tonos, intensidades y luces espectacular.
Seguramente buena culpa de esa moda la encontremos en los setup gaming que se montan muchos streamers, que decoran los fondos con tonos que van cambiando o con una textura de formas que hacen que queramos tener uno como ese en casa. Ahora bien, ¿realmente merece la pena gastarse el dinero en algo que solo vamos a disfrutar nosotros y, como mucho, algún colega que venga a casa a acompañarnos?
Tres escenarios posibles
En el caso de que quieras decorar tu habitación para jugar con iluminación y lámparas LED debes pensar qué objetivo te has marcado. Y en este punto debes tener en cuenta tres alternativas –seguramente haya más– que son las habituales entre todos los gamers que deciden dar el paso en esta dirección de fabricarse su propio espacio de juego iluminado con lámparas LED.
Para nosotros mismos
La primera posibilidad es que deseas tunear de una forma mucho más espectacular tu setup y sentirte al jugar mucho más arropado por un ambiente que puedes controlar a tu antojo, poniendo y quitando tonos, dejando otros fijos o provocando que la propia lámpara los vaya cambiando, aprovechando, además, las esquinas para proyectar y crear espacios acogedores. Para este cometido, el modelo de Ydene os puede servir porque es discreto, apenas ocupa lugar y cuenta con un pie para no necesitar una mesilla u otro mueble parecido, y proyecta la luz de manera mágica sobre esos rincones.
Para el streamer en ciernes
La segunda alternativa es la que todos imagináis: eres un streamer –de éxito o no, da igual– y quieres ofrecer un background lleno de efectos de luz, proyecciones, etc. Para ese caso, lo mejor es, o bien comprar tiras de luces LED, que se pueden adaptar a cualquier forma como una estantería, una ventana o un mueble, o modelos como los de HPYLIF que podemos moverlos fácilmente para cambiar si es necesario la orientación y fuente de la iluminación, así como el color, etc. De esta forma, podemos situarlos fácilmente detrás de muebles y crear efectos muy bonitos que tiñen de uno o varios colores las paredes, etc.
Para mejorar las partidas
La última alternativa es que no quieres tanto una ambientación general de la habitación sino más bien que la iluminación te acompañe cuando juegas, con efectos que proyectas sobre la parte trasera de la televisión o el monitor. Se trataría, en este caso, de una configuración parecida a la de la imagen de apertura del artículo –arriba del todo–, con lámparas que puedes mover fácilmente por el escritorio o el mueble para dar la luz concreta en cada instante. Para obtener ese efecto, los modelos de CheDux os van a venir de perlas porque son compactos, fáciles de mover y no ocupan demasiado espacio además que se sincronizan con la música ofreciendo una cadencia de tonos sincronizada.
En todos los casos, podréis intercambiarlos y darles otros usos, porque aquí como en todo las posibilidades son infinitas y con total seguridad seréis capaces de imaginar otras alternativas mucho más espectaculares que las que os hemos ofrecido nosotros aquí.
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